martes, 26 de mayo de 2020

Después de El Capitán Veneno (IV): La peculiaridad en comparsa

Que Juan Carlos Aragón llegaba a la mayoría de la población, aunque llevara la etiqueta de complicado y hermético en sus composiciones, es algo que más que constatable. En nuestro post de hoy, el tercero de esta serie, vamos a bucear por sus peculiaridades en los temas que cantó con sus agrupaciones, con el fin de que nos quede aún más claro, si es posible, que no solo de política, nihilismo, revolución y nabos vivió el poeta, con una visión sobre distintos conceptos que están más cercanos a lo poético que a lo carnavalesco, corriendo el riesgo de la incomprensión, de la crítica feroz pero, por supuesto, haciendo lo que bien le parecía. Así es que siéntese y disfrute de este recorrido cronológico sobre lo más particular que hemos encontrado de los repertorios de Juan Carlos Aragón:

La venganza y la locura en Los condenaos


Cuando me vaya del barrio en Los ángeles caídos


Yo quiero que esta tribu en Los americanos



Hoy me quiero emborrachar en 1800.Los inmortales



Afición en El golfo de Cádiz



Ay, cada vez que me emborracho en Los parias



Ni las noches de mayo de sábanas calientes en Araka la kana



Cuando los ojos abría en La banda del Capitán Veneno



La muerte es una playa en Los comparsistas se la dan de artistas



De tanto preguntar por Dios en Las noches de bohemia



Ay hermano en Los príncipes



Di tutte le calamitate en La Serenissima



Adivina, adivinanza en Catastrophic Magic Band



Si en vez de a Cristo en Los ladrones



Para que escuchen tu canto en Los millonarios



Playa dorada en La guayabera



Detrás de la vieja en Los peregrinos



Por anchos que sean los mares en Los mafiosos



Cuando nace un gaditano en La gaditaníssima 



El sábado mi compañero Ventolero terminará esta serie de especial dedicadas al Capitán Veneno para recordarlo al año de su fallecimiento. No dejó huérfanos de un montón de cosas, sobre todo de revolución, y no podremos escuchar nunca todo eso que tenía en su imaginación en plena madurez creativa. Sin duda, una pena inmensa para el mundo del arte en nuestra tierra que tiene en el Carnaval el exponente popular tan necesario en estos días.

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