domingo, 29 de enero de 2012

Concurso: Sesión del 28 de enero

Antes de darle duro a la sesión (que ha sido por lo general pa' darle y con la mano abierta), agradecer en mi reincorporación a mi compañero Bermauntier, o Paco para los amigos, el haber llevado para adelante esto en los días que por desgracia me he ausentado, y decir que me ha encantado ver como unos y otros han comentado en las sesiones, dando sus opiniones.

La opinión de Ventolero.-

La apuesta de Julio Pardo para el presente año inauguró la sesión del sábado, con mucha fuerza pero a mi parecer una falta preocupante de originalidad en el repertorio (desde la presentación al estribillo). A partir de entonces, se inició una debacle incesante salvada por la esperada y poco más: la chirigota "Los que están pendientes del tiempo" podían haberse ahorrado el viaje desde Sevilla. Subió varios enteros (con un pasodoble que levantó al patio butaca y todo...) la comparsa femenina de la noche, pero a mi ya saben, me transmiten poco... Tras el descanso, la primera chirigota llevó más voces que repertorio pese a su juventud. La siguió "La banda de los girasoles" que tuvo algún tramo más que escuchable, ahí es nada. "Los monologuistas, Paramount Cady" no fueron gran cosa, lástima. La última comparsa me pilló transladándome de un lado a otro, si ustedes la escucharon, tienen en los comentarios su rincón donde explayarse a gusto sobre esta o cualquier otra de la sesión.

Ahora, las dos destacadas. Y vaya destacadas:

· Qué morro y qué jeta: de fuera y una quintenta:

Si, este cuarteto es la primera agrupación que les traigo. Porque hay que tenerlos cuadrados, de escuadra y cartabón para que te echen el telón, que hacía años que no se echaba a una agrupación (y mira que este año gente como los de "El óraculo de gadeiras" o "El 15R" le pusieron énfasis y ganas en devolver esta costumbre de la que no entiendo por qué se ha perdido su práctica).

Hicieron las delicias del Falla, primero del gallinero, y posteriormente del Teatro entero. Un caramelito para su cachondeo vamos... Entre que no se les escuchaba muy bien, y que los golpes de humor destacaron por su ausencia en todo el repertorio, parecía increíble que no se bajaran por su propio pie.

Pero no, hubo gestos y algún diálogo entre los ofensores y los ofendidos, que ofendían con su ¿repertorio? Incomprensible que no cayera el telón antes. Y que no, que ellos en sus trece, el gallinero en sus catorce, y el que le daba al botón ni idea de en qué estaría pensando... parecía que faltaba un empujón. Y lo dio la mujer. Si, había una mujer, pero en este caso estaba al nivel de sus compañeros masculinos: era un montón de mala. Se la vio agobiada, en algún momento hizo el gesto de despedida con la mano, pero llegado el momento dio un paso hacia adelante y exclamó algo así como: "...¿podéis dejarnos cantar el final?".

Cayó el telón como metáfora de una única respuesta a esa pregunta. No, no los veremos en cuartos. Y si dios, alá, o E.T. quiere, tampoco más en el Falla.

Por haber conseguido recuperar la sana tradición que tanto echaba de menos les doy...:


"Este año, hasta con... nota":de 5


· Llámame Jesús:

A falta de ver el resto de agrupaciones venideras, es sin duda alguna la apuesta más arriesgada de lo que va de concurso. No ya sólo porque los Majaras vaya este año de Jesús, sino porque todo su repertorio va orientado al personaje y reflejar su parte más luchadora, reivindicativa y tolerante, alejada de todo lo que representa y defiende la Iglesia actual.

Una presentación, que empieza bien raro, para que engañarnos, pero que conforme avanza se pone a tono, y acaba con una fuerza envidiable. Posiblemente solo la agrupación de Pedro, gran ausente de la comparsa, es la que puede hacerle sombra en ímpetu y calidad de voces a la de Don Antonio Martín. Así de claro.

Los pasodobles tienen una música deliciosa. Sobre ella bailan las voces de todos y cada uno de los componentes, defendiendo en la primera letra la verdadera ideología de este supuesto mesías y del camino a la salvación eterna. El segundo, continuista, arremete sin miramientos contra todo el estamento eclesiástico actual. Muy buenos, en definitiva, a diferencia de los cuplés, que están flojitos, más el segundo que el primero, pero que cuentan con un delicioso estribillo (que recuerde al final del popu de "Medio Siglo", eso también).

El popurrí culmina esta oda a la rebelión desde la perspectiva del hijo de dios, con magníficas voces y una contundencia en repertorio que, insisto, muchas para si la quisieran.

En definitiva...:


"Este año, hasta con... nota": de 5


Y en la sesión del domingo se contará con el pasado primer premio de coro juvenil o el nuevo cuarteto de la gente de "Si Emilio hablara..." entre otros. ¡No se lo pierdan!

3 comentarios:

R_Bernal dijo...

Mi opinión con Antonio Rivas y los Májaras es que tanto grupo como música son superiores al letrista. No quiero decir que sea malo, simplemente que a mí no me termina de convencer. Cuestión de gustos.

Un abrazo y me alegro que la vuelta al blog haya sido rápida Ventolero

Ventolero dijo...

Gracias Roberto, un abrazo fuerte.

José Candau dijo...

El primer pasodoble es de Pepito Martinez?