martes, 17 de noviembre de 2009

La pre de la pre: otro rollo al año siguiente

Primero he de informarles que ya están más que acordadas las fechas del concurso 2010 del que ya todos tenemos bastantes ganas de que lleguen. Les pongo las de adultos que son de las que nosotros nos encargamos (que esto no quiere decir, a los lectores tiquismiquis, que no hayamos escuchado alguna juvenil en 2009 y anteriores realmente buena y mencionable):

MODALIDAD DE ADULTOS (21:00 horas)

* Fase de Preliminares: (Viernes 15 de enero al sábado 30 de enero) - 16 sesiones de las cuales, 13 sesiones de 10 agrupaciones y 3 de 11 agrupaciones.

* Domingo 31 de enero, día de descanso (Como novedad se descansa los domingos entre fase y fase no en sábado como en el COAC 2009).

* Fase de Cuartos de Final: (Lunes 1 de febrero al sábado 6 de febrero) - 6 sesiones de las cuales, 4 sesiones de 10 agrupaciones y 2 sesiones de 11 agrupaciones.

* Domingo 7 de febrero, día de descanso.

* Fase de Semifinales: (Lunes 8 de febrero al miércoles 10 de febrero) - 3 sesiones de las cueles, 2 sesiones de 10 agrupaciones y 1 sesión de 11 agrupaciones.

* Final: (Viernes 12 de febrero).

Y viendo este maratoniano calendario vuelvo a recapacitar sobre lo que ya les hablé algún tiempo: la pre de la pre. Porque he visto que se pretende hacer, que hay diferentes ideas sobre la mesa y voy a apoyar dos de ellas:
1) No cantar el popurrit en preliminares. Esto tiene sus problemas para, sobre todo, las chirigotas, donde sacan, en su mayoría, la artillería humorística de la agrupación, donde se puede contar una historia y donde más carcajadas, por tiempo, se pueden sacar. Pero vendría bien para ahorrarse el tiempo de algunas comparsas con popurrises de muerte, de esos de cabezadita en sofá, y de los coros también. Aunque la tara principal que veo sería la de las chirigotas y la del cuarteto. Esto, como se ve, hay que estudiarlo algo más.
2) Pase a cuartos de final de todas aquellas que pasaron en el concurso anterior. Esta me parece mucho más factible y podrían mantenerse los cabezas de serie, eso sí, ya en cuartos. Entonces, los que madrugamos nos podríamos ahorrar escuchar ciertas sesiones de preliminares (en algunas ocasiones hay que ser selectivo) y que todas las que el jurado desee pasaran a los cuartos de final. Creo, sinceramente, que esta sería la más factible y lógica. Sería una especie de casting pero ya en febrero.

Y poco más que decirles. Si ustedes quieren pueden comentar lo que les parezca o apetezca que yo estaré encantado de debatir con ustedes.

3 comentarios:

Alfred dijo...

Está bien, debatamos, pues, que el tema, fascinante y preocupante a partes iguales, bien lo merece.

La segunda de las soluciones que aquí se proponen para acortar el concurso me parece, por un lado, injusta, para todas aquellas agrupaciones que estén empezando o que no tengan demasiado renombre, por cuanto favorece a unos grupos sobre otros (más concretamente a los que menos ayuda necesitan en principio, además, a causa de la calidad que se les presupone, sobre todos los demás), cuando todos debieran partir de cero cada año (demasiada importancia se le da ya muchas veces a los nombres, en esto del carnaval, y demasiado se les pasa la mano en ocasiones, como para reforzar esa dinámica con esta clase de medidas en lugar de combatirla), mientras que por otro lado me parece inviable, si pretendemos que el Falla continúe funcionando como espectáculo y que el público siga asistiendo a las funciones tras pasar por la taquilla. Si es con dos o tres cabezas de serie en el cartel, en fin, y ya hay funciones en las que el Teatro Falla se queda, literalmente, desierto... ¿quién demonios va a pagar por ir a ver lo que en principio prometerían ser sesiones llenas de morralla, única y exclusivamente?

La primera opción, consistente en prescindir del popurrí durante las actuaciones en la fase preliminar, sí la encuentro más razonable, pero tampoco es que me convenza demasiado, sinceramente, pues si bien es verdad que haría mucho más llevadera la intervención de las agrupaciones chungas, sabrían a muy poco, en cambio, las de las buenas. Por no mencionar, claro está, que algunas, con tanto atrezzo como llevan, tardarían más en preparar su decorado que en la propia actuación. Y bueno, viéndolo ya desde el punto de vista de las agrupaciones... si se les suele hacer cuesta arriba preparar todo un popurrí para cantarlo luego cuatro veces tan solo, como máximo... si encima ese máximo se reduce a tres, solamente, se corre el peligro de que comiencen a cuidarlo menos, directamente, al entender que no compensa tanto esfuerzo para lucirlo luego tan poco, al final.

Alfred dijo...

En mi opinión la solución para este problema es mucho más sencilla que todo eso, y mucho más complicada, a la vez. La solución, creo, pasaría por que el personal tuviera un poquito más de autocrítica, a la hora de valorar si realmente tiene algo que aportar, participando en el concurso, o no, así como por que se le tuviera un poquito más de respeto, asimismo, a nuestro amado concurso.

Con esto me refiero, por ejemplo, a esas agrupaciones que llevan años y años concursando, sin haber mejorado ni un ápice y sin haber superado jamás la primera criba (que las hay, y bastantes, además), que ya podrían plantearse si esto es lo suyo, digo yo, y si no debieran limitarse a actuar en su local de ensayo para sus familiares y amigos, que al final son los únicos que los acaban escuchando en el Falla, no entorpeciendo así inutilmente la marcha de un certamen de esta categoría. Al menos podrían darse (y darnos) un respirito de algunos años, en fin, y pasado ese tiempo volver a participar, a ver si han mejorado lo suficiente, entretanto, como para dar el salto a la siguiente fase de la competición, o si deben volver a realizar un paréntesis de otros pocos años, por el contrario, antes de volver a intentarlo.

Y bueno, también me refiero, por supuesto, a todas esas agrupaciones que vienen desde la quinta puñeta, con repertorios genéricos, diseñados para que puedan ser cantados en cualquier lugar, y no preparados expresamente para el Falla, para Cádiz y su Carnaval, por lo tanto, que a mí me sobran por completo, y que me parece que no le tienen el respeto debido a nuestro concurso, al considerarlo un simple bolo más dentro de su circuito de actuaciones, y más aun a esas otras que rizan el rizo de la mala educación, al traer, en el colmo de la desfachatez, no ya uno de esos repertorios genéricos que digo, sino uno con referencias locales de su tierra de origen, sea cual sea, que aqui en Cadiz, claro está, ni se entienden ni interesan.

Pero claro, todas estas son cosas que tendrían que salir de los propios implicados, y que muy difícilmente se regulan mediante un reglamento o cualquier otro mecanismo. Si esto sigue así, no obstante, van a obligar a que se tome alguna medida drástica al respecto, porque lo que no se puede consentir es que el concurso muera, como está muriendo, de éxito.

Por de pronto, me parece a mí, ya podría decirse todo esto que yo he dicho, y que muchos pensamos, abiertamente y en los medios de comunicación. Pero eso, evidentemente, no interesa, por la mala imagen que podría dar de la ciudad y de la fiesta, y las consecuencias que esto podría tener sobre nuestra economía. Y es que ante el dinero, como bien cantaba este año Martín, no hay quien rechiste, poco importa que nos estemos cargando el concurso y hasta la propia esencia del Carnaval, prostituyéndolo y comerciando con él de mala manera.

Un saludo.

Ventolero dijo...

Yo aprovecho para preguntar, ¿alguien sabe la fecha exacta de la ostioná y la erizá? Graciaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas...