Más sencillto, más de Cai

Me gustan todo tipo de pasodobles, no le hago ascos a ninguno aunque más de uno me ha dado ganas de vomitar pero estos son los menos y suele ser por la temática o por el mensaje implícito. No con todos se puede estar de acuerdo. Los que cuentan historias también me gustan, me gustan mucho porque a lo mejor me siento identificado, a lo mejor conozco a alguien a quien le ha pasado. También soy mucho de pasodobles del alzheimer, las madres, el amor o la amistad. Esos me gustan una barbaridad porque son los que más siento como míos. No me gustan nada esos que piden la pena de muerte o se
sobrepasan en juicios de valor, algunos insultantes o demasiado retóricos.
La cuestión es que me gustan los pasodobles en general pero hoy les traigo la muestra de algunos muy sencillitos, de esos que da gusto oír a capella, mil veces, a una voz, a tres voces, repetidas... De esos pasodobles que te pones en bucle en el reproductor del ordenador porque te llevan a otro mundo:

Con una guitarra y la voz cascada de Los Vikingos (Quiñones)


Este video ha sido posible gracias a la realización fantabulosa de Gala la que, según nos cuentan las malas lenguas, es novia de Roberto el del comentario de ahí abajo.

Yo nací en una tierra de Athletico Agujeta -el peor equipo del mundo- (Santander)


En sus pasajes la Biblia de El cielo de Cádiz (Tovar)


Yo no veo justo de De plaza en plaza (Yuyu)


La copla de Cai de Los Regaera (Bustelo)


Yo soy el presidente de Los veterano del Vietnam (Sánchez Reyes)

Cada uno tiene lo suyo. Lo importante es el pellizco, eso que te deja en la memoria, la idea fija, la música, la belleza. No está bien obsesionarse por nada, ni por el carnaval, ni por el contrincante. Por nada.
Mucha suerte a todos aquellos que ya empiezan los ensayos y a disfrutar porque ya huele.